El Mincyt dio a conocer los resultados de su gestión en 2014. A menos de un año de las próximas elecciones, el encuentro también sirvió para hacer un repaso por las políticas que marcaron los últimos siete años y que serán puestas en juego el próximo octubre.
Agencia TSS – El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación (Mincyt), encabezado por Lino Barañao, realizó un balance de su gestión en 2014 que incluyó los resultados en materia de inversión, infraestructura y articulación. Desde 2008 hasta la actualidad, el presupuesto aumentó más de 400 por ciento y en 2015 alcanzará la cifra de 7.106 millones de pesos. “Hemos sido catalizadores de un cambio en la ciencia”, destacó el ministro durante la presentación.
En diciembre de 2007, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner tomó la decisión de darle a la ciencia y la tecnología un lugar destacado entre las políticas de estado. Así, la antigua Secretaría de Ciencia y Tecnología (Secyt), bajo la órbita de Educación, dejó lugar al primer ministerio de la Argentina y América Latina que contempló a la innovación productiva asociada a la ciencia y la tecnología.
Para 2015, a siete años de la creación del Ministerio, el Estado Nacional proyecta financiarse por 1.298.326,7 millones de pesos y la inversión en ciencia y tecnología será un 19,3 por ciento más que en 2014, aproximadamente un 0,6 del presupuesto total. Además, se estima un financiamiento externo que rondará los 780 millones de pesos, 200 millones de pesos más que en 2014.
«Soy optimista en cuanto a la irreversibilidad de algunos cambios; la incertidumbre está en el presupuesto futuro», señaló Barañao en relación a los logros obtenidos desde el inicio de su gestión y a las perspectivas a futuro. También remarcó como una deuda la falta de inversión en ciencia y tecnología por parte de los actores privados.
Con respecto a la formación y empleo de investigadores, cuando Cristina Kirchner comenzó su gestión, el Conicet contaba con 5.301 investigadores y 6.143 becarios, con sueldos promedios de 5.606 pesos y 2.961 pesos, respectivamente. Actualmente, la planta de investigadores supera los 8.000 científicos, que cobran un promedio de 22.140 pesos, mientras que los becarios ascienden a 9.237 y reciben, en promedio, 10.158 pesos. A su vez, son 1.130 los científicos repatriados que se desempeñan en universidades e Instituciones de investigación argentinas y se financiaron más de 5.500 pasantías y becas en el exterior.
Por otro lado, la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, dependiente del Ministerio de Ciencia, financió 2500 proyectos en 2014 por 1.400 millones de pesos. Con respecto a 2008, los fondos disponibles se han duplicado, aunque las iniciativas promovidas solo aumentaron un 17 por ciento.
En estos años, se inauguraron nuevas instalaciones para la sede del Ministerio, reubicado recientemente en las ex bodegas Giol, el Banco Nacional de Datos Genéticos y la Fundación Argentina de Nanotecnología. El número de obras ejecutadas hasta la fecha es de 123, por un monto de 713,6 millones de pesos y más de 100.000 metros cuadrados. El plan de infraestructura total asciende a una inversión de 1.277 millones de pesos y contempla, entre obras en ejecución y proyectadas, 40 instalaciones más.
La federalización de la ciencia es otro de los objetivos de la cartera que encabeza Barañao, y que en 2014 arrojó resultados por 204 proyectos ejecutados y 1.162 en ejecución en toda la Argentina. Para estos emprendimientos, el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología contó con un presupuesto de más de 380 millones de pesos.
Por último, en la presentación se señaló que el Estado argentino mantiene cooperación en materia de investigación científica con 70 países, con más de 1.100 proyectos y el intercambio de 3.281 investigadores argentinos y extranjeros. En compromisos multilaterales, los proyectos aprobados rondan los 430, por un monto de 1.210 millones de pesos, monto subsidiado en parte por la Unión Europea.
17 nov 2014
Temas: Financiamiento, MINCyT, Política tecnológica, Presupuesto 2015