La organización Alter Mundi modificó routers comerciales durante años para desplegar redes comunitarias adonde no llegaban los proveedores de Internet. Ahora diseñaron su propio router y el proyecto fue premiado por su aporte a las comunidades rurales.
Agencia TSS – Hasta el año pasado, cualquier persona que tuviera los conocimientos suficientes para cambiar el software (firmware) de un router comercial podía adaptarlo a sus necesidades. Esa práctica, que resultó frecuente para el desarrollo de redes comunitarias, tuvo un freno cuando la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos la prohibió y la medida se generalizó a otros países, de la mano de un cambio en las políticas de muchos fabricantes. Eso determinó que Alter Mundi, una organización no gubernamental (ONG) nacida en Córdoba, decidiera diseñar su propio router.
El dispositivo concebido por Alter Mundi permite agregarle la posibilidad de transmitir por cualquier frecuencia de radio, incluidas las frecuencias de TV White Spaces (TVWS). Estas porciones del espectro, que entre otros destinos suelen ser utilizadas para la transmisión de televisión digital, pueden estar libres en alguna zona u horario determinado. De hecho, en estas frecuencias se encuentran experimentando gigantes de la tecnología como Google, Microsoft y Facebook para brindar conectividad en zonas rurales. Recientemente, el Gobierno nacional, a través del ENACOM, firmó un convenio con Microsoft para la realización de pruebas en la Argentina, que despertó críticas de diversos sectores.
Las redes de Alter Mundi han sido instaladas en la zona del valle de Paravachasca, en Córdoba. Su base está en La Quintana, un pueblo de 1.000 habitantes y la red está conectada con otros siete pueblos de la zona. Además, desplegaron un enlace inalámbrico que conecta con la localidad Nono a través de las Altas Cumbres y planean brindarle conectividad a otros pueblos cercanos de Traslasierra.
Los equipos que brindan Internet inalámbrica utilizan energía solar y fueron montados por los vecinos de los pueblos de ambos lados de las Altas Cumbres. Su modelo de red también es usado en Santiago del Estero en el pueblo Boquerón, y en pueblos de Nicaragua, Brasil y Colombia. Hace algunos años también hubo una iniciativa similar en el Delta bonaerense, que actualmente está mutando hacia la provisión de un servicios de Internet tradicional.
Nicolás Echániz, administrador de la red de La Quintana y uno de los fundadores de Alter Mundi, le dijo a TSS: «Queremos tener un dispositivo abierto, libre, que esté listo pronto para poder empezar a hacer pruebas. No queremos que empiecen las regulaciones [en relación a TVWS] y después llegar tarde como nos pasó con el Wi-Fi. Es interesante llegar antes, porque si va a haber asignación dinámica de espectro es importante no esperar a que venga Google, instale miles de routers por todo el interior y la asignación dinámica de frecuencias deje de serlo porque ya habrán ocupado todo”.
Echániz participó de un panel del Foro de Gobernanza de Internet de Argentina, al que asistió TSS. Allí, Hugo Miguel, subsecretario de Planeamiento del Ministerio de Modernización de la Nación, indicó que conversaron con Echániz para acordar la posibilidad de otorgarle a Alter Mundi un permiso para realizar pruebas en estas frecuencias de radio que aún no están reguladas. El proyecto de Alter Mundi ha ganado premios que le permitieron acceder a financiamiento y tienen un plazo de 12 meses para presentar el producto final. Según Echániz, el router estará terminado en octubre de 2017 pero esperan que unos cuatro meses antes de esa fecha ya estén disponibles prototipos para realizar las primeras pruebas.
Las comunicaciones en las frecuencia TVWS, entre 500 y 700 mHz, tienen la ventaja de que resultan eficientes para atravesar obstáculos y tienen un menor nivel de ocupación que otras porciones del espectro. Pero su utilización podría conspirar contra el despliegue de la televisión digital terrestre (TDA) y las empresas de telecomunicaciones también pujan por esas frecuencias.
Cambios en el pueblo
En La Quintana, la red instalada por Alter Mundi es administrada por una asamblea y tiene un portal y listas de correo en las que se anuncian todas las actividades e información útil del pueblo. También hay un servicio de chat, streaming de una radio local y un reservorio en el que se guarda material creado por los vecinos. Mediante este servicio un vecino publicó una pregunta sobre si alguien conocía el llamado a audiencia pública del proyecto de instalación de una cantera para la explotación de basalto –que produce liberación de asbesto en el aire– y otros vecinos presentaron información sobre la explotación de este mineral y los trabajos que se estaban haciendo en su zona. En la audiencia que se realizó una semana después del primer mensaje se inscribieron 300 oradores en un pueblo de 1.000 habitantes.
27 oct 2016
Temas: Conectividad, Electrónica, Internet, Software libre, Tecnologías sociales, Telecomuncaciones