Las noticias que leemos, escuchamos y vemos sobre tecnología parecen limitarse a la informática y la electrónica de consumo. ¿Y el resto de los desarrollos tecnológicos indispensables para la soberanía y la economía del país? El análisis de TSS.
Agencia TSS –Hagamos un breve ejercicio mental. Cuando escuchamos la palabra tecnología, ¿qué es lo primero que se nos viene a la cabeza? Algunas probables respuestas: un celular, la última tablet, un Smart TV, el videojuego favorito, un iPod, un casco de realidad virtual. No está mal. Después de todo, vivimos en la sociedad de la información y estos dispositivos forman parte del popular grupo de las TICs, tecnologías de la información y la comunicación. Otros, quizás más afines a las historias de ciencia ficción (que cada vez son más ciencia y menos ficción), habrán pensado en robots, autos inteligentes, naves espaciales y todo tipo de artefactos automatizados, esos de “última generación”, que hacen todo solos. Tampoco es una respuesta errónea. Pero, ¿solo esto es tecnología?
Claro que no. La tecnología es más, mucho más que eso. Es la electrónica presente en computadoras y celulares, sí, pero también en casi todas las áreas de la industria. Son los insumos y equipamientos para la salud, como tomógrafos, vacunas, medicamentos y dispositivos que asisten a personas con alguna discapacidad. Son los componentes electromecánicos de las fábricas o las imponentes maquinarias para el agro, y también los nanomateriales utilizados para mejorar la calidad de distintos productos. En fin, la tecnología nos envuelve en cada objeto de nuestra rutina diaria: medios de transporte, sistemas proveedores de energía eléctrica, electrodomésticos, cámaras de seguridad, semáforos y así se puede seguir infinitamente.
Que estos desarrollos son tecnología no es ninguna novedad, pero a veces pasan desapercibidos ante el poder arrasador de las TICs y de la electrónica de consumo. En esta imagen reducida que tenemos de la tecnología contribuyen, en gran parte, los medios de comunicación. Veamos algunos ejemplos.

“redes sociales”, “apps”, “mobile”, “juegos” y “gadget”.
En lo que respecta a medios gráficos, se puede observar que en el cuerpo principal de importantes diarios y periódicos no existe una sección destinada a la tecnología. Sin embargo, el diario Clarín tiene un suplemento semanal llamado Next, con secciones como “redes sociales”, “apps”, “mobile”, “juegos” y “gadget”. Por su parte, si bien los diarios La Nación y Ámbito Financiero, al igual que el periódico Perfil, no tienen suplementos destinados a la tecnología, sí poseen una sección en sus versiones digitales. Estas secciones muestran una lógica similar a la del suplemento Next, con noticias sobre los trucos del FIFA 15, el nuevo celular para amantes de selfies y relojes inteligentes que pronostican el clima. Por otro lado, Página 12 y Tiempo Argentino no cuentan con suplemento ni sección tecnológica.
En tanto, en las principales emisoras de radio del país también cuesta encontrar espacios específicamente destinados a la tecnología. Esto no quiere decir que no se hable de temas tecnológicos, sino que este tipo de información está dispersa en programas tipo magazine, que abarcan distintas temáticas. Sin embargo, se pueden encontrar algunas columnas fijas. Por ejemplo, en el programa Esto que pasa, de Radio Mitre AM 790, enfocada principalmente en las TICs, pero que abre el juego a otras disciplinas como la robótica y la genética. También está la columna de ciencia y tecnología del programa No somos nadie, de radio Metro FM 95.1, en la que se tocan temas relacionados con el concepto más amplio de la tecnología, como el desarrollo de radares y el lanzamiento del satélite ARSAT-1.
¿Y qué espacio ocupa la tecnología en los noticieros televisivos? La columna más completa parece ser la del noticiero de la TV Pública, Visión 7. Se trata de un espacio semanal en la edición de la mañana y otro en el resumen de medianoche. Aquí, los temas tratados no se limitan a las TICs, sino que también se informa sobre prótesis para personas con discapacidad, desarrollos de estudiantes e impresoras 3D, entre otros. Un ejemplo concreto: la computadora industrial abierta argentina, desarrollada por universidades y empresas nacionales, una plataforma de hardware libre destinada especialmente a pymes, que puede ser usada para diversas aplicaciones, sustituye importaciones y ahorra costos. Es decir, un desarrollo tecnológico nacional. Por su parte, en Telefé Noticias a las 20, la columna de tecnología está dedicada a las novedades en TICs, aunque en la edición matutina, Baires Directo, suelen tratarse temas tecnológicos más amplios, sin contar con una columna fija. En tanto, en los noticieros de Canal Trece, tampoco hay espacios específicos para la tecnología, mientras que en TN hay un programa llamado TN Tecno, dedicado a “lo último” en smartphones, videojuegos y tablets.

sin tratarse temas tecnológicos más amplios.
Finalmente, en algunos de los medios digitales más visitados, como la agencia de noticias Télam y los portales Infobae y Minuto Uno, existen secciones de tecnología, pero prácticamente se limitan a las TICs, de manera similar a las secciones de las versiones digitales de los medios gráficos. Marcas del mundo de la informática por todos lados: Microsoft, Spotify, Apple, Samsung, BlackBerry… Solo Télam abarca algunos temas más, como drones y sondas espaciales.
De este modo, parece que cuando los medios de comunicación hablan de tecnología, hablan de informática y electrónica de consumo. Sin embargo, es importante aclarar que el hecho de que haya secciones, columnas y programas dedicados a las TICs no está mal. Lo que intenta plantear este análisis, que por supuesto no es exhaustivo sino que más que nada pretende describir un estado de situación para abrir el debate, es que sería interesante que los medios empiecen a considerar la tecnología en el sentido más amplio del término. Que haya espacios dedicados a comunicar los desarrollos tecnológicos en materia de energía, agro, defensa, salud, seguridad y de todo tipo de industrias; tanto lo que se hace en el país como lo que no se hace y hay que importar. Qué se puede sustituir de lo que se importa, cómo se puede agregar valor a la tecnología que se produce, cómo se pueden armar consorcios de exportación de productos tecnológicos.
Estos temas, que pueden parecer más alejados o menos interesantes que el último celular o la nueva tablet, repercuten directamente en nuestra economía y nuestros “bolsillos”, además de tener efectos de mediano plazo en la economía del país. Si en vez de tener que importar computadoras, electrodomésticos, e incluso trenes y aviones, se fabricaran acá, todo eso nos costaría menos dinero. Ahora bien, fabricar estos artefactos en el país significaría agregar valor a la producción local, lo que se lograría creando puestos de trabajo calificados para los técnicos, ingenieros y científicos argentinos. Y finalmente, también aumentaría el monto de las exportaciones, efecto que produciría un ingreso mayor de divisas al país, terminaría con la escasez de dólares y dejaría menos espacio para la especulación financiera, una de las principales causas de la inflación. Por lo tanto, ¿nos interesa saber más de estos temas? Y a los medios de comunicación, ¿les interesa comunicarlos? ¿Les conviene? Queda abierto el debate.
03 oct 2014
Temas: Medios de comunicación, Tecnología, TICs